“Trata a las personas como si fueran lo que deberían ser, y ayúdalas a convertirse en lo que son capaces de ser.” Goethe

lunes, 23 de febrero de 2009

ESCOMBROS



Nunca sabré por qué construyo puentes,
sin saber si habita alguien el otro lado.

Por qué salvar tanta orografía escarpada,
lagos, pantanos o islas;
llenas de restos de naufragios de sí mismos.

Son puentes para despistar a la soledad,
que cuesta más destruirlos que hacerlos,
y hay que tener mucho cuidado,
para que los escombros no te aplasten el corazón.

Santa451 23-02-2009

5 comentarios:

DEVA dijo...

Nunca sabré para qué los construyo,ni sabré si algún dia alguien al otro lado merecerá la pena el esfuerzo.
Muchos naufragios esperando balsas de salvación y algunos siquiera ciegos ante la playa.
Mucha soledad hace construir puentes y al final, Rafa,los escombro se me cayeron encima.

Ten cuidado no te creas todos los sueños,algunos vienen cargados de veneno...

Un beso aplastado

Santa dijo...

Deva: Nada de quedarse aplastada...Eh!!!
Hay que subirse encima de los escombros y darse cuenta que valen para ver mejor las puestas de Sol...
Y cuando hace frío igual hasta los quemamos para calentarnos ¿No?
Hay demasiada gente interesante por conocer... Para quedarse atrapados en la mierda de los escombros...

Un beso fuerte... fuerte

Rafa dijo...

Puentes... La sola palabra evoca, y escombros, buf se ponen los pelos de punta. Pocas palabras y mucho mensaje, por lo menos este puente sigue arriba. Gracia sSanta

Santa dijo...

Rafa: ¿A qué mola el puente ese de Córdoba...?

Gracias por tu puente tocayo, me hacen falta todos; Para no perder la esperanza...

Bueno que me he puesto mu trascendente y me mola más la juerga...

La próxima prometo una de risas.

Unknown dijo...

me resulta curioso la cantidad de blogs que habláis al mismo tiempo de la soledad, yo admiro a quienes no conocen su significado, no porque estén acompañados, si no porque no lo necesitan.


Mahatma Gandhi 1869-1948. Político y pensador indio

Un error no se convierte en verdad por el hecho de que todo el mundo crea en él.

Carpe Diem